(Escribo teniendo de fondo musical, LAS CURANDERAS de Laura Murcia)

Esta encantadora curandera a la que llamo abuela el 15 de noviembre cumplió 97 años. Cada vez que parte alguien sigo hablando en presente de ella, para mí es la manera de seguir honrando, no lo que fue en vida, sino lo que deja tangible aún en este mundo convirtiendo su presencia en un imán de gratitud para el universo.💫

Esperó este día como lo era, como lo ES, una MUJER ADMIRADA por su grandeza, su esencia única y SU PODER, esperó este 15 de noviembre para sucumbir, viajar y cruzar esta existencia.

LOLOLO, se fue a vacacionar al gran, exclusivo y majestuoso hotel de 10 estrellas “CIELO”.😇

Lola Pinargote Mieles de Tarabó, una verdadera reina amazona, una valquiria terrenal, nos acompañó casi 100 años. Una mujer cuya evolución, transformación y AMOR lo honramos todos aquellos que tenemos la bendición de disfrutar de esta hermosa alma sabia, terca, ocurrente, sumisa, indomable, coqueta y HACEDORA de grandes hijos, nietos y bisnietos.

La tierra sigue oliendo a ella, mi Olmedo continúa abrazándola sentada en su silla, en aquella esquina donde ha quedado grabada como una postal inmortal de lo que implica la belleza, ternura y sabiduría de una de las mujeres más emblemáticas de mi pueblo, el aire sigue bailando de agradecimiento por todo un camino entregado a la crianza de cada uno de sus vástagos. Pasa que mi LOLOLO, fué muy “movediza”, así se lo decía, cada vez me lo afirmaba y reíamos alto, tiene 24 hijos, solo 13 sobrevivieron para disfrutarla y hacer junto a ella y mi abuelo Antonio un sendero de vivencias, experiencias y anécdotas…24 HIJOS, CARAJO!!! ¡¡No había tv e indiscutiblemente LOLOLO es amante del movimiento!! ¡¡BELLA!! 💖

Mi abuela, esta maravillosa MUJER MEDICINA, aquella que todas llevamos dentro, es una entidad llena de historias. Esta mujer sanadora que despertó desde el interior hasta el exterior con el pasar de los años, sobre todo desde la partida del abuelo Antonio, para apreciar las cosas con mayor trascendencia, equilibrio, intuición, entendiendo que la persona que más le podía ayudar, que más conocimiento le regalaba, que más afecto y valores influía en su vida para tener un anclaje fuerte en este universo era ELLA MISMA.

La estirpe materna tiene un tejido muy fuerte en la vida de una mujer, así tenga o no recuerdos de sus ancestros. Son los ecos de sus vidas los que tejen los hilos de los tatuajes en nuestros úteros. De ahí la importancia de sanar el linaje de manera consciente, con que quedarnos y con que no, LOLOLO se quedó con lo mejor de mi abuelo.💟

Mi abuela siempre entendió que en este mundo tenemos un tiempo finito y depende de nosotras aprovechar el tiempo como MUJERES. Sus palabras certeras, sin filtro pero amorosas llegaban al corazón. Reímos, lloramos y aquel tiempo determinado que compartí con ella es una razón primaria para amar más mi tierra, mis dominios, mi Olmedo.

En toda mi infancia, juventud y adultez, LOLOLO fué y representa ser el porta estandarte de una tribu, una verdadera matriarca. Una tribu con una identidad de unión, buen humor, humanidad, coherencia, altruismo y empatía. Pienso que nunca lo asumió como tal porque no estaba consciente de ello, pero fue FELIZ en su rol, después que renació de vivir en un mundo sumiso y machista al que perteneció muchos años por el compromiso matrimonial con mi abuelo, quien fue también un personaje tan atípico y único…Y ojo: ¡¡amo a mi abuelo!!💝

¡Y si me interrogas sobre los recuerdos con mi LOLOLO, te los puedo citar con la frescura mental que me dan aún estos 51 años!

Ahí van:

-De pequeños nos castigaban a mi hermano Efrén y a mí, cuando escapábamos de su casa, nos hacía arrodillar sobre granos de maíz SECO, este era parte del diálogo, ja:

YESY: Abuelita créeme que ¡YO NO FUI¡
LOLOLO: Ay mijita, he criado a tanto muchacho que ya huelo cuando mienten, y si me lo vuelves a repetir te vas a quedar 15 minutos más arrodillada.
YESY: Si abuelita, pero mira que te lo estoy diciendo con respeto, ¡rebájame la pena! (o sea unos minutos menos, ja)
LOLOLO: ¡3 minutos menos y silencio!

-Mi hermano y yo hacíamos asustar a mi abuela, cuando estaba de espalda en la cocina, ella siempre tenía en la mano un cucharón o una cuchara, y ante el susto se viraba y aventaba lo que tenía en ella. A Efrén y a mí nos caía lo que lanzaba en cualquier parte del cuerpo. Y luego entre gritos, repeladas y su frase célebre: “pendejos, ya van a ver”, la abrazábamos y reíamos.

-Aprovechamos todas las posibilidades para que ella me entregue flores al final de cualquiera de mis espectáculos. ¡Ambas AMAMOS ESTOS MOMENTOS!💝

-En alguna ocasión hablamos de las arrugas, y Efrén sacó una plancha y le dijo: ABUELITA PLÁNCHATE¡! Ja, ja. 😁 Y ella envuelta en risas permitía que aquel nieto consentido le haga de todo. Así mi hermano pasaba la plancha fría en su brazo.

-Recuerdo el manjar que hacía, y aquel rompope maravilloso que me lo enviaba con tanto amor a Guayaquil en una botella grande, lo hacía exclusivamente para mí y ese detalle me hace sentir tan amada y valorada.

Recuerdos, anécdotas, risas y también lágrimas. Solo LOLOLO puede provocarnos todo ello en un día.💝

Aún sigo agradeciendo la fuerza de esta mujer guerrera para vivir tanto, y con tantas penas. Sepultó a 5 de sus hijos: Betty, William, Chichi, Pepe y Eduardo. ¿Puede existir un dolor más grande para una madre? No lo creo, ni tengo el mas mínimo interés en saberlo, pero prácticamente asumo que NO.

Ya no está en este mundo y al mismo tiempo está tan en él. Desde la cosmovisión todos llevamos una herencia que nos lleva a la tierra, es parte de nuestro ADN: el olor a campo, a río, a montañas, a flores y en mi tribu aquel olor a ELLA, a esta mujer jaguar, salvaje, irreverente, abrumadora, dulce, terca, incorruptible que nos ha unido, que nos une para hacer incrementar el verdadero concepto de FAMILIA, la efectiva significación de CLAN, la sabia indiscutible intuición de ¡AYLLU! (familia en quechua) 👩‍👩‍👧‍👦

Recojámonos como testigos, levantémonos en canto, unión, coherencia, paciencia y amor para seguir honrando su vida, para honrar su memoria y el significado de lo que es una ABUELA, bailemos al son de “Los Dukes” “Un paso fino” y abraza la importancia que es el disfrute de una ocurrente, graciosa e integra AWICHA (abuela en quechua).

Su partida un lujo: vivió rodeada de amor, de atenciones de sus hijos, nietos y bisnietos, se fue sintiéndose el alma más mimada, alzó su vuelo acompañada y valorada por todos, partió FELIZ y yo me quedé… igual de FELIZ por su larga y deseada visita, por impactar y mejorar este mundo y por todos los ríos de amor que su corazón noble dejó regado en este universo.💫

LOLOLO, siempre en mí, siempre en mi olor, siempre en mi ADN!

¡Desde el amor y la gratitud a esta MUJER UNIVERSAL!

SIEMPRE YESY.💖